Parto Natural
El parto natural puede llegar a ser toda una ceremonia que te permite vivir una experiencia que te transforma, te realiza, te madura y te da la seguridad de recibir ese hijo que nace con toda la confianza de poder protegerlo.
El apoyo de la pareja es muy importante, como hombres no podemos ni debemos mantenernos al margen del evento, es un momento crucial en la vida de pareja que te deja huella.
Se usan diferentes técnicas para favorecer la relajación durante un trabajo de parto natural como el agua caliente, la música, los movimientos, el baile, masajes, ejercicios con la pelota.
Lo más importante es lograr proporcionar un apoyo verdadero a la mujer, brindarle la comodidad suficiente, permitirle ser libre de adoptar diferentes posiciones en diferentes sitios para poder recibir a su hijo de una forma gentil, suave, respetuosa y sin intervenciones rutinarias.
En un parto natural se recibe al recién nacido con tranquilidad, se le permite una adaptación progresiva al nuevo ambiente, lenta, cálida, a su ritmo… apoyado en el regazo materno, sin prisa por separarlo del cordón umbilical y evitando prácticas invasivas a menos de ser absolutamente necesarias.
Se respeta el contacto piel a piel con su madre que fortalecerá el vínculo entre ellos, además de que le será posible buscar el pezón e iniciar la lactancia en forma temprana.